Y a son 37 los días que llevo en Oulu. Cada uno de ellos ha tenido algo especial, pues Finlandia siempre tiene algo que enseñarme. Hoy por ejemplo, comencé mi curso de finés y tengo que decir que no parece un idioma complicado, pues la primera clase ha sido más que divertida. Ya sé decir algunas palabras, suficientes para poder presentarme en la sociedad finesa. La profesora es mayor, pero es alucinante lo bien que habla inglés y es que, por lo que me he documentado los profesoras, aunque hay pocos, están muy bien preparados. La verdad que tengo que sentirme afortunada de estudiar, aunque sea por unos pocos meses, en el mejor sistema educativo casi del mundo.
Cambiando de tema he de deciros a todos aquellos preocupados por el tiempo de Oulu que estamos teniendo unos días increíbles, con seis o siete grados y la nieve comienza a desaparecer y mira que tengo ganas ya, porque mis rodillas están llenas de moratones por mis caídas varias en la bici a causa del deshielo. Ahora el paisaje va cambiando y es muy bonito todo verde, con árboles... La verdad que me recuerda a la tierrina. Lo más importante del cambio, es que por fin veo luz más allá de las cinco de la tarde, con el cambio d hora y el aumento de la luz ahora suele anochecer a eso de las 8 o así.
Estoy muy contenta estos día, ya que comienza a llegar gente nueva,aunque esto parece una invasión de italianos. De hecho, en el curso e finés son todos nuevos, así que es una buena manera de conocernos mejor con el suomi (finés en finés).
El fin de semana me voy de viaje por el Báltico, así que tendréis todo tipo de detalle. Hasta entonces quiero dar las gracias a todos los que me seguís y a todos lo que os interesáis por mi erasmus.
KITTOS

OS dejo una canción que siempre me recordará a Oulu, Es muy pegadiza.